Pese a las concesiones de la Xunta, los vecinos continuarán reivindicando que se solventen los problemas causados por la obra de la variante de Noia
Marta Gómez
Noia / La Voz 28 de mayo de 2014 05:00GMT
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Las pruebas de carga de la variante de Noia realizadas en lunes sirvieron para que el conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, conociese de primera mano las reivindicaciones de los vecinos del núcleo de Taramancos afectados por la obra de la circunvalación. Sobre el terreno, el responsable autonómico se comprometió a acometer un paso inferior para dar acceso a sus fincas y a estudiar las otras demandas que le plantearon. Sin embargo, estas concesiones no son suficientes para los residentes, que mantendrán su lucha para conseguir todo lo que proponen.
Es verdad que su principal petición, la del paso subterráneo que permitirá salvar la variante para conectar el núcleo con las fincas de los vecinos, se ha visto satisfecha, pero quedan otras demandas importantes: «Xa sufrimos bastante con que pase a estrada por aquí, polo menos que nos deixen en condicións». Ahora, el principal asunto de preocupación para los residentes es el paso elevado que se está construyendo, que, señalan, «estréitase de xeito inexplicable formando unha curva moi perigosa con espazo para un só coche».
Piden que esto se corrija, pero no será sencillo. En la reunión que mantuvieron con el conselleiro y técnicos responsables de la obra quedó patente la divergencia de opiniones en este sentido. Todos coinciden en que el acceso al puente que pasa sobre la variante «queda mal» tal y como está, pero mientras para unos es un peligro, para otros es más bien una cuestión estética.
Cautela de Patrimonio
En cualquier caso, en ese tema la última palabra la tendrá Patrimonio, que ha establecido una cautela arqueológica tras la aparición de los restos de un poblado castreño. El conselleiro insistió en que tienen las manos atadas y deben ceñirse a la legalidad, aunque intentarán que Patrimonio ceda. Mientras, los vecinos no entienden por qué a ellos les afecta la ley «pero o castro levantárono todo para facer a variante». Agustín Hernández reconoció las molestias que sufren los vecinos, recordó que toda obra conlleva unos perjuicios y dijo que «intentaremos minimizar as afeccións todo o posible».