Del enlace del corredor Brión-Noia con la variante en Orro han corrido ríos de tinta, sobre todo cuando hace algo más de un año surgieron dudas sobre cómo se ejecutaría finalmente. Las opciones eran dos: o construir el paso elevado previsto en el proyecto o ahorrar el coste de esta infraestructura y utilizar la rotonda de la AC-550 como conexión entre ambas infraestructuras. Finalmente, la Xunta se decantó por la primera de las dos posibilidades y ahora el viaducto que comunicará las dos carreteras comienza a ser una realidad tras iniciarse las obras.
A estas alturas, se ha levantado ya el primero de los pilares que sujetarán el puente y se trabaja en el segundo. Por parte de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas no se ha dado una fecha para el remate de estos trabajos, pero indicaron que se están ejecutando dentro del plazo previsto. Sea como sea, la actuación debería estar concluida el próximo verano, ya que esa es la última fecha fijada por el propio presidente de la Xunta para la entrada en servicio de la variante noiesa después de sucesivos retrasos.
Precisamente, en la última visita de Núñez Feijoo a Noia, a principios de este mes, habló del inminente inicio de los trabajos en este paso elevado y destacó la ventajas que tendrá la infraestructura para mejorar las comunicaciones viarias de la comarca con la capital compostelana. Este enlace es uno de los tres viaductos previstos a lo largo del trazado de la variante
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